Frío Mañanero.

Querido Diario ninfómano:

Hace días que no encuentro la solución a ninguno de mis problemas. ¿Soy yo? ¿O es el cambio de estación que me altera?
Tampoco encuentro las palabras exactas para expresar lo que siento y pienso en cada momento. Creo que esto cambiando... Sí, estoy cambiando.

Ya no me gusta el reloj de pared de mi habitación,no me sorprenden las luces de los semáforos al cambiar, no me apetece pisar charcos y me paso la mayor parte de las noches en vela viendo películas de Almodóvar en mi portátil.
Hoy por la mañana, cuándo he pasado por ese camino estrecho para ir al colegio, le he saludado a la anticuada y antipática vecina del cuarto ¡Qué extraño!
Vamos, una temporada que ni yo me entiendo.

Ya no juego a las muñecas, casi ni las toco siquiera, se me olvida dar de comer a mi pez Cachalote y desde hace unos días noto una extraña sensación por mi pecho que recorre todo mi cuerpo en forma de una descarga eléctrica fuerte -pero agradable- cuándo mis ojos se posan en el compañero de clase que tengo al lado.
¡Miguel sólo me parecía un chico majo!

Mi madre dice que en efecto, estoy cambiando, y que eso se debe al crecimiento humano y a las hormonas... pero yo no entiendo ni papa de lo que me dice.
La tía Mili me dice que pronto me crecerán las tetas y querré vestir con esos zancos que llevan las señoritas, y que todos los chicos del mundo mundial me parecerán unos cabrones.
(¡Uy,perdón, son palabras textuales!)

Te iré informando pues, querido diario, de mis transformaciones a lo largo del mes aunque, hoy por la mañana me he despertado y me he mirado al espejo, y por más que me he buscado... no he encontrado ningún rastro de esas tetas que me dicen!



Noviembre de 2005







POCO TIEMPO PARA ACTUALIZAR.
Parece que los exámenes se van acabando... menos mal, porque si esto va a más me desmayo (literalmente)
Gracias por pasaros!



bel COBAIN